Cabezota, inconformista, pesada, borde, terca, impaciente, soñadora. Me ilusiono con facilidad y me decepciono rápidamente. Experta en sonrisas fingidas y en disimular que todo está bien. Aparentemente soy fuerte, pero me derrumbo cada 2x3. Llorona, llorona a más no poder. Intento aguantar y aguantar, pero después de semanas la situación se hace insostenible y mi forma de liberarme es llorando. Soy muy sensible y cualquier cosa me afecta, aunque no lo demuestro. No soy muy orgullosa y sé reconocer cuando tengo que pedir perdón. Odio las discusiones, sobre todo si soy yo la que sale perdiendo. Sé escuchar y ayudar a las personas cuando lo necesitan, y eso que ni yo misma sé lo que hacer con mi vida. Soy demasiado blanda y perdono (casi) siempre a la gente. A veces soy muy tonta, porque perdono demasiado. Soy una buena amiga, y en general buena persona. Intento decir siempre la verdad, aunque a veces se me escape alguna mentirijilla. No muestro nunca mis sentimientos ni le digo a las personas que las quiero, pero en realidad no soy tan fría: sólo los que de verdad me conocen saben que en realidad puedo llegar a ser cariñosa. No creo en el amor para toda la vida, quizás porque nunca me he enamorado. Me gustan las comedias, sobre todo si son románticas. El chocolate es mi vicio favorito. La música es la única que no me ha abandonado en los malos momentos. Adoro dormir y sobre todo soñar, no necesariamente dormida. Me gustan los abrazos y los besos, y más si son robados.
11.12.12
13.10.12
Ahora mismo mi mente está hecha un lío. Van y vienen recuerdos sin ton ni son. Pero todos relacionados contigo. El sonido de tu voz, tu cara, el olor de tu colonia, nuestras conversaciones, nuestros paseos, tu "¿qué te pasa, enana?"; todos y cada uno de los recuerdos que tengo de ti.
Y de repente me doy cuenta de por qué estoy mal. Necesito verte, abrazarte, estar unos días contigo e intentar recuperar todos los años que no estuvimos juntas.
Como siempre, me tendré que conformar con esos recuerdos y seguir adelante, porque a saber cuando te volveré a ver.
12.10.12
Hoy es uno de esos días que te levantas con el pie izquierdo, y por más que lo intentes no consigues estar bien. La presión de los estudios, los problemas familiares... Nada consigue hacerte sentir bien, ni siquiera la música. Tienes ganas de llorar y no sabes exactamente por qué, no te das concentrado y haces todo mal. Hasta que llega alguien que te hace reír hasta no poder más.
Supongo que entenderéis por qué digo que es la mejor amiga que podría tener.
9.9.12
Hoy me he parado a pensar lo mucho que
ha cambiado mi vida (y yo misma) en este último año. Recuerdo el
principio del curso pasado, que comencé sin ganas de estudiar,
ilusionada porque sentía que me hacía mayor, pero también asustada
y con un poco de miedo al futuro. Me acuerdo perfectamente de la
cantidad de personas que conocí, y gracias a muchas de ellas aprendí
quien realmente vale la pena y quien no se merece ni la hora.
Recuerdo perfectamente como si fuera ayer aquel 25 de marzo, el peor
día de mi vida, cuando casi lo pierdo para siempre. Gracias a ese
horrible día, me di cuenta de quien estaba ahí apoyándome, a quien
podía considerar realmente mi familia o mis amigos. También me
acuerdo de aquel 5 de abril, cuando la vi después de 5 años, y que
si no fuera por las circunstancias, habría sido el mejor día del
año.
En estos últimos meses aprendí que
hay que disfrutar cada momento bueno, porque ya vendrán los malos
tiempos. Lloré tanto que aprendí que las lágrimas no sirven para
nada, pero que a veces es necesario llorar hasta que te duelan los
ojos para sentirte un poco mejor. Aprendí a valorar lo que tengo, a
demostrar un poco más lo que siento, a decir te quiero
a algunas personas importantes, a pedir más veces perdón, a dejar
el orgullo a un lado y reconocer mis errores y mis defectos.
Sobre el amor...¿qué decir del amor?
En estos momentos ni siquiera sé si existe o es todo una mentira que
nos quieren hacer creer las películas desde que nacemos; cuando por
fin creía que existía me di cuenta de que no todo es tan bonito
como nos quieren hacer ver. Pero de los errores se aprende, y en esta
ocasión aprendí que el amor ya llegará (si es que existe
realmente...)
Aunque ya lo sabía, me di cuenta de
que amigas como ella no hay ninguna, y que si fuera cierta la frase
“Tanto tienes, tanto vales”
yo valdría más que todo el oro del mundo sólo por tener una amiga
como ella.
En el
último año tuve días buenos, días malos y días en los que me
hubiera gustado estar en otro planeta. Ahora lo que tengo que
aprender es a olvidarme de los malos momentos y disfrutar cada minuto
como si fuese el último de mi vida.
17.5.12
¿Sabes? No te odio. Puede que en algún momento lo haya dicho, porque estaba enfadada contigo. Pero no, no te odio. Eres indiferente para mí. Me hiciste daño, muchísimo daño. Fuiste mi mejor amiga desde los 2 hasta los 12 años. Y eso es mucho tiempo. Fueron 10 años inseparables, la una en casa de la otra, yendo a comer a tu casa, quedándonos a dormir juntas, compartiendo nuestros "enamoramientos", riendo, llorando, discutiendo...Pero cuando todo se acabó, me di cuenta de que no significas nada para mi. Es verdad que en su día fuiste muy importante para mí, pero después del daño que me hiciste, todo eso está olvidado. Todos los recuerdos están congelados, guardados en el rincón más oscuro de mi corazón. Mentiría si te dijera que no los descongelo a veces, que no recuerdo lo felices que fuimos juntas. Pero para nada te echo de menos. Porque mi vida es mucho mejor desde que tú no estás.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)